Si pensamos en Navidad implícitamente estamos haciendo referencia a Israel como centro histórico y religioso de los festejos de Navidad. Y dentro de este variado pais recomendamos visitar en Navidad las ciudades de Jerusalén y Belén.
Jerusalén:
El día de Navidad en Jerusalén es realmente especial. Coincide con el Shabbat de la comunidad judía, es decir, el séptimo día bíblico destinado al recogimiento y la meditación, por lo que hay una fuerte presencia de católicos e islámicos.
En esta época del año miles de peregrinos recorren el Vía Crucis y asisten a misa en las varias iglesias religiosas de esta importante y gran ciudad. Además la Iglesia del Santo Sepulcro recibe numerosos grupos que asisten a misa en diferentes idiomas. Por eso si visitas Jerusalén en esta época podrás asistir a una misa en tu idioma.
Belén:
Si bien no es una ciudad donde encontraremos todas las costumbres y postales tradicionales de Navidad, como ser el canto de villancicos o la nieve que decora muchos otros lugares; nos encontraremos con casas decoradas con estilo navideño, árboles de Navidad, luces de colores, Papá Noel tocando campanitas.
Además la Plaza de la Natividad o del Pesebre se viste de Navidad con eventos que cuentan con importante seguridad militar. Las iglesias dan misa en diferentes idiomas. Todos los festejos dan cuenta de la pluralidad y las múltiples culturas religiosas que conviven en una misma ciudad y viven la Navidad de una manera diferente.
Ambas ciudades son centros turísticos en esta época del año, por ello te encontrarás con mucha gente y ruido. Encontrarás abundantes puestos de vendedores ambulantes pues en esta época del año se genera mucho dinero. Pero más allá de ello siempre habrá lugar y tiempo para vivir la Navidad con un espíritu religioso como en ninguna otra parte del mundo se vive.
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